"No llores más, dame la mano, contame tu suerte, de esta manera quizás no sea la muerte la que nos logre apagar el dolor"
Y en un momento me ví...
Estaba entre tanta gente
caminando en la multitud,
y en El Viento te salí a buscar.
"Al fin seremos todos, después que sólo seas uno, es un arte muy difícil cuando domina el temor. El mundo tan hostil nos lleva decapitados, que sentirte a mi lado me hará mucho mejor. Saltemos este absurdo y desaparezcamos, en un lugar sagrado dejaremos el dolor"
Siempre, o casi siempre, que tomamos decisiones, creemos que estamos haciendo lo mejor... Lo mejor según nuestras propias convicciones, claro...
Es así como, de a poco, vamos formando nuestra forma de ser y de pensar...
Pero... Y si dejáramos todo éso que formamos con el tiempo de lado... ¿Volveríamos a ser los mismos?
Yo, personalmente, creo que sí... Quiero decir, quizás actuemos distinto en ciertas cosas, y cambiemos en algunos aspectos... Pero quiénes somos en realidad... Éso nos lo dice el corazón, porque en el amor está nuestra identidad... Y el corazón no entiende de razón... Es ahí, donde realmente actuamos por lo que sentimos y por lo que realmente somos, y no según nuestras convicciones.
Y vos... ¿Volverías a sentirlo?
Cecilia N. Zanoni.
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