No te decimos adiós, sólo te decimos hasta siempre.

Y cuenta que el secreto que aún se guarda en vos,
con vos también se moriría.
La vida hoy tendrá una triste realidad,
y la verdad, una mentira.
Pero en cada cuento que arrazó mi corazón,
sabía yo que estabas vivo.
Eterno atardecer, sentado al borde
del abismo más profundo
¿Quién puede descorrer el velo que una vez
lo ha hecho todo tan absurdo?



Y andarás preguntándote ¿Por qué todo es así? Sobre fugaces planetas, soñabas con ser feliz.
Canibalismo galáctico, un gran banquete espacial, saboreando estrellas, las fauces negras andan por aquí.











¿Podemos comparar el "canibalismo galáctico" con la inconciencia de la sociedad?
Nos destruimos entre nosotros, por un simple hecho de ignorancia, e inconciencia.
¿Cuántas vidas más vamos a perder para abrir los ojos?
El problema no está en la banda, ni en el público... Tampoco en la cancha, ni en la estación de tren, ni en los boliches... El problema está en el sistema. No hay seguridad.
Quien debería cuidarnos, mira para otro lado, si es que no nos roba, o hace abuso de poder... Y nadie hace nada, porque así "estamos bien", nadie busca el cambio porque es más cómodo quedarnos así, es más fácil sentarse a mirar...
Necesitamos abrir los ojos, tomar conciencia de lo que hacemos...

Y como pidió el Indio, basta de bengalas, por favor! Los recitales son una fiesta mejor aún sin bengalas.


Fuerza para la familia de Miguel, que hoy es un ángel más. La Renga y Los Mismos de Siempre los apoyamos.

Cecilia N. Zanoni.

"Loco de pensar, queriendo entrar en razón y el corazón tiene razones que la propia razón nunca entenderá"

"No llores más, dame la mano, contame tu suerte, de esta manera quizás no sea la muerte la que nos logre apagar el dolor"

Y en un momento me ví...
Estaba entre tanta gente
caminando en la multitud,

y en El Viento te salí a buscar.

"Al fin seremos todos, después que sólo seas uno, es un arte muy difícil cuando domina el temor. El mundo tan hostil nos lleva decapitados, que sentirte a mi lado me hará mucho mejor. Saltemos este absurdo y desaparezcamos, en un lugar sagrado dejaremos el dolor"

Siempre, o casi siempre, que tomamos decisiones, creemos que estamos haciendo lo mejor... Lo mejor según nuestras propias convicciones, claro... 

Es así como, de a poco, vamos formando nuestra forma de ser y de pensar...

Pero... Y si dejáramos todo éso que formamos con el tiempo de lado... ¿Volveríamos a ser los mismos?

Yo, personalmente, creo que sí... Quiero decir, quizás actuemos distinto en ciertas cosas, y cambiemos en algunos aspectos... Pero quiénes somos en realidad... Éso nos lo dice el corazón, porque en el amor está nuestra identidad... Y el corazón no entiende de razón... Es ahí, donde realmente actuamos por lo que sentimos y por lo que realmente somos, y no según nuestras convicciones.

Y vos... ¿Volverías a sentirlo?

Cecilia N. Zanoni.